Acercadonse mayo como es costumbre ya hay que ir pensando en la siega del heno, como se dice en este gremio hay que ser hormiguitas para que no te pille mal el invierno. Lo primero es el ganado, los dos lechones que no tenían ni gota de pienso y el agua la tenían enturbiada, las ovejas como siempre pidiendo de comer la avena aunque se maneen de hierba. Las gallinas con poco pienso compuesto y se han acostumbrado a romper uno o dos huevos haber como les quito la manía. Los pollos no dan castigo, ellos tenle agua y harina y crecen como la espuma. una vez terminado eso toca dar una vuelta al huerto, que ya hay media hectárea puesta de verduras y ver si hay que regar o curar algo y finalmente lo que nos corre mas prisa, enganchar las maquinas y ver que hay que hacer. La primera es la segadora, que con mas de cuarenta años siega como el primer dia, esa se soltó funcionando y tras un enganche y engrase solo toca conectar la toma de fuerza y apretar el botón. Esa no tiene problemas, tan solo meter la cuchilla nueva bajar los rodillos y a segar. La pirula es un poco as antigua y solo se usa para abrir las calles y poco mas pero esa tiene la cuchilla sin estrenar y solo toca echar gasóleo darle a la manivela y a correr. Ahora toca la mas complicada que es la empacadora, en teoría es la que mas sistema lleva y por tanto hay que revisar mas, una avería en esta cuesta demasiado dinero y tiempo que no nos podemos permitir.
Pues así se dice por aquí, que los días de agua o se esta en la cantina o se esta en la fragua, como no hay perras para cantina, ni hierros que soldar, tendremos que seguir con la rutina. Alrededor de las ocho ya mi cuerpo comenzó a despertarse, no con muchas ganas de trabajar, pero si que había que hacerlo. Hoy tocaba ganado menor, aunque es menor también tiene su trabajo. Apenas he llegado a la finca lo primero ir a revisar las tres ovejas y ver si por gracia del espíritu santo ya me han parido. Todos me dicen que están demasiado gordas y por eso no quedan preñadas, otros que el carnero se ha hermanado con ella y no las cubre, la verdad es que yo no se mucho de esto. Por esto avisamos a un amigo pastor, quien me dio las borregas para que yo las fuera criando. Al parecer dice que están preñadas, de seguro una de ellas, de las otras dos parece que desconfía un poco. Yo ta había tomado medidas y aparte el carnero haber si se encela mas y así cuando se lo eche va mas potent
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